El viernes 10 de junio de 2022, en el municipio Manaure, se llevó a cabo un grupo focal con el objetivo de seguir indagando sobre las dinámicas de las violencias que afectan a las mujeres del departamento de La Guajira.
Este encuentro contó con la presencia y participación de dieciséis (16) mujeres Wayúu quienes compartieron ideas y debatieron sobre las dinámicas de las violencias, su cultura y el papel que ocupan las mujeres en esta.
Entre los puntos a destacar, se debe mencionar el acuerdo que hubo entre las participantes en cuanto al rol relevante que ocupan las mujeres en su cultura. La mayoría coincidió en que ellas son las verdaderas cabezas de familia, ya que son las encargadas de la economía del hogar y sus principales proveedoras.
Como valor positivo, resaltaron el hecho de que son mujeres emprendedoras, dedicadas a distintas tareas, entre las que destacan las actividades vinculadas con el tejido, la pesca, como comerciantes, entre otras.
En cuanto a la problemática de la violencia contra las mujeres en el contexto de las relaciones de pareja, reconocieron que se trata de algo muy común, pero que las mujeres no dicen nada por temor o por miedo a las represalias del agresor si llegan a hacerlo y por sus familias.
Algunas señalaron que la razón principal de las violencias es el machismo, otras creen que es el alcohol.
Hubo consenso en cuanto a los efectos del alcohol en los hombres como detonante de la violencia hacia ellas. Relataron sus propias experiencias y las estrategias a las cuales recurren para protegerse de la eventual agresión de un compañero o pareja cuando está borracho.
También se abordó la difícil situación que viven las mujeres Wayúu que laboran como trabajadoras domésticas.
Ante la falta de empleos formales y estables, muchas mujeres Wayúu prestan sus servicios como trabajadoras domésticas en Manaure y otras zonas del departamento en condiciones de explotación laboral, ya que en la mayoría de los casos no les pagan el salario mínimo, laboran más horas de las establecidas y en condiciones precarias. Esto a su vez las expone a ser víctimas de explotación sexual y otras formas de violencia contra las mujeres por razones de género.
Las participantes consideran que una de las alternativas para enfrentar esta problemática es que las mujeres Wayúu tengan más información y conozcan cuáles son sus derechos. Sugieren que las entidades del Estado con competencia en la atención de las violencias contra las mujeres, desarrollen campañas y jornadas dirigidas a la difusión de las normativas existentes, los derechos de las mujeres y las entidades a las cuales pueden acudir.
Ante la pregunta de la investigadora sobre si conocían a alguien o ellas mismas habían activado la ruta institucional de atención en casos de violencia contra las mujeres, la respuesta general fue que no porque lo hacían mediante sus usos y costumbres.
Cabe destacar que, la aceptación de esos usos, no implica que las mujeres Wayúu participantes en este grupo no tengan una postura crítica sobre la manera de resolver los casos de violencia en el contexto de una relación en pareja.
Una de las soluciones que proponen para prevenir este tipo de violencia es la formación y capacitación de mujeres Wayúu profesionales y técnicas en áreas como Trabajo Social, Psicología, Etnoeducación, entre otras, sobre estos temas para que ellas sean multiplicadoras y repliquen el conocimiento en sus comunidades. Consideran un error que venga alguien “de afuera”, que no sea de la comunidad Wayúu a hablar de estos debido a que el mensaje no llega; debe ser una igual, una par, que conozca su cultura y domine su lengua.
A manera de cierre, manifestaron la importancia de organizar encuentros como este, no solo para que las mujeres puedan hablar de las violencias que las aquejan, sino que se abran espacios mixtos donde hombres y mujeres puedan hablar y entablar diálogos sobre los problemas y las distintas visiones que se tienen.
