El jueves 09 de junio de 2022, en las instalaciones del Hogar Infantil de Dibulla, se desarrolló un grupo focal en el cual participaron mujeres trabajadoras de esta institución: administrativas, docentes y auxiliares.
Las participantes manifestaron que las mujeres que sufren de abusos y violencias ven afectada su salud de distintas maneras. Desde la perspectiva de la salud mental, se ven inmersas en situaciones agudas de estrés, se deprimen, se aíslan, no desean tener vida social e incluso, pueden, a su vez, ser violentas ellas con sus hijos e hijas. En casos extremos, pueden llegar a quitarse la vida, al suicidio.
En cuanto a la salud física, señalaron que dependiendo del lugar donde sea golpeada la mujer, pueden verse afectados distintos órganos. Pusieron como ejemplo que el agresor le de una patada en el vientre a la víctima, lo que puede afectar la matriz, los ovarios, entre otros órganos. También manifestaron que la depresión desencadenada por la violencia que padecen, puede tener repercusiones en su salud física, incluido el cáncer.
Las participantes señalaron que una de las estrategias para prevenir este tipo de violencia es mediante el diálogo en la familia, entre las parejas y con los hijos e hijas. Consideran que una de las razones por las que se da este tipo de agresiones es por la falta de comunicación entre los miembros de la familia, por eso, ellas apuestan por esta estrategia en los hogares.
También precisaron que otra estrategia de prevención de las violencias contra las mujeres por razones de género debe ser trabajar en el fortalecimiento de la autoestima y el empoderamiento de estas; que se valoren, que aprendan que tienen derechos y que ninguna persona tiene la potestad para pisotearlos. Hubo consenso en considerar que es a través de la educación y capacitación que se puede lograr que las mujeres se sientas más seguras de sí mismas.